lunes, 28 de febrero de 2011

Tres tristes lustros



Fuiste un regalo efímero en mi vida... algún día podré (y todos los que te amamos) 
estar con Dios y estar contigo.

viernes, 25 de febrero de 2011

Pin (gü) inos Literarios


¡Mira!
Esto pertenece a los inicios de la Humanidad.
La foto primera pertenece a la única fuente informativa (uuuuy) donde se dio a conocer mi primer premio literario: ¡La gaceta universitaria!
Era apenas el quinto concurso de cuento de la UniSon, y lo hacían regional. Era el UNICO concurso literario a que teníamos acceso los aspirantes a escritores, y los ganadores adquiríamos una “aura” de éxito que todo intelectual de la letra envidiaba… al menos hasta el siguiente concurso.
Mi trabajo fue construido con una nota periodística que recorté de un diario del DF: Una mujer fue condenada a 20 años de cárcel por matar a su hijo –lo asfixió con una almohada-; el niño tenía dos años, padecía el síndrome de Down. La mujer fue diagnosticada con cáncer y en su desesperación por no tener quién se hiciera cargo de su hijo después de su muerte, prefirió “salvarlo” así.
Pero oh, desgracia… poco después de los hechos, resultó que el diagnóstico de cáncer ¡era falso!
Ahora que lo pienso tal vez fue una artimaña de ella para deshacerse de su lastre existencial; pero eso no lo sabré nunca.
El cuento se llamó “Lex” y lo perdí para siempre. ¡Sí, lo perdí!
Ya volteé al revés mi casa, mis papeles viejos, y no lo encuentro. Se publicó en EL IMPARCIAL, eso sí. Debe haber sido Manuel Borbón quien me hizo el honor, pues él editaba entonces lo que se ofrecía de cultura. Habré de buscar en los archivos del periódico, un día de éstos.
Mi aspecto físico de aquellos días era éste:

                                                      







No estoy ante un castillo europeo, já... es un puente en Fantasy World de Disneyland (Los Angeles)

Es una hermosa cursilería de foto.